La antepenúltima película de Stanley Kubrick se estrenaría en 1980 y estaría basada en el libro de Stephen King del mismo nombre, "The Shining", en español "El resplandor".
Protagonizada por Jack Nicholson en compañía de Shelley Duval, Danny Lloyd y Scatman Crothers, (entre otros) la película nos cuenta de como un hombre llamado Jack (Jack Nicholson) aspira a ser un gran escritor y para ello quiere buscar trabajo en un lugar tranquilo. Así, acepta un trabajo en un hotel que durante el invierno se queda completamente vacío y va allí con su familia; su mujer Wendy (Shelley Duvall) y su hijo Danny (Danny Lloyd), llamado cariñosamente Doc, por los dibujos animados.
Las cosas van bien cuando llegan, el lugar parece hospilatario, a pesar de las nevadas, dentro no se está del todo mal, pero las cosas empiezan a cambiar notablemente, por las fuerzas que habitan en él desde hace tiempo.



Con la maestría que nos tenía acostumbrados Kubrick, nos encontramos ante una gran adaptación del libro de Stephen King, en el que algunos dicen que es la mejor adaptación de un libro al cine.
La película te mantiene con los ojos abiertos desde el primer momento en que la familia entra en la casa, y es que desde justo ese momento Doc empieza a notar algo raro, es más, incluso lo nota en su propia casa, viendo a dos gemelas y a un gran charco de sangre en el hall que va hacía dos ascensores.

La estupenda interpretación del pácifico y a la vez peligroso Jack, es sin duda uno de los personajes más populares y pavorosos que ha interpretado Nicholson, que a la vez que intenta mantener la calma se vuelve tan loco que cree ver personas que nunca ha conocido en su vida.
La temática psícotica que gira en torno a la casa está muy bien ambientada, no tanto la estética de la familia de Jack, pues poco sabemos acerca de ellos, tan sólo como actuan en algunas ocasiones o ante los momentos drásticos que se empiezan a ver en los últimos 40 minutos de película, donde todo se empieza a volver caótico y algo mareante.
Los primeros planos nos muestran las montañas de Oregon, donde fue rodada la película durante los meses de invierno curiosamente, y donde el Hotel Overclook es en realidad una posada llamada Posada Timberline.
La película por supuesto tiene momentos inquietantes y muy recordados en la historia del cine, el famoso "Jack ya está aquí" o las frases de Redrum y Murder (esta última si le das la vuelta significa lo mismo) en las puertas en los últimos momentos de película, así como el "libro" de Jack, que al principio empieza a tomarse en serio, y que más tarde tan sólo tiene la frase de "No por mucho madrugar, amanece más temprano" que está acompañada de la entrada del ya ido de la olla Jack, en un oscuro plano y con los ojos completamente perdidos, tanto como su cabeza.
Sin duda alguna es una de las mejores películas de terror de la historia del cine y que hizo popular el manejo de la Steadicam, aparato que permite moverse para que la cámara no se tambalee, y por supuesto con la dirección de un grande del cine.